|
Rabino Nilton
Bonder participa do Primeiro Encontro Interreligioso com o Papa Francisco,
nos dias 07 e 08 de setembro, no Vaticano.
PRIMER ENCUENTRO
AMÉRICA EN DIÁLOGO-NUESTRA CASA COMÚN
7 y 8 de Setiembre de 2016
Sede del Pontificio Consejo para el Diálogo
Ciudad del Vaticano - Italia
El Primer Encuentro de Diálogo Intercultural e Interreligioso:
América en Diálogo-Nuestra Casa Común
se celebró en la ciudad del Vaticano el 7 y 8 de septiembre de
2016.
Entre las conclusiones del Diálogo, se destacan:
El cuidado de la Casa Común: el planeta es nuestra casa,
todos los pueblos deben de convivir en armonía entre sí
y con la naturaleza.
América es zona de paz: es la región con menos conflictos
bélicos, y la OEA tiene como un objetivo prioritario mantener la
paz en el hemisferio.
Desigualdad y exclusión: el gran desafío de las Américas
y el mundo es la falta de oportunidades de progreso para todos.
La encíclica papal, Laudato Si es una doctrina
a favor de los derechos humanos, la democracia y la tolerancia religiosa
que nos da una visión común.
La mujer, como grupo más vulnerable debe ser una prioridad
a ser incluida en las políticas de desarrollo sostenible.
El Diálogo fue auspiciado por la Secretaría General de la
Organización de los Estados Americanos (OEA), el Instituto de Diálogo
Interreligioso (IDI) y el Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso.
Asistieron representantes de gobiernos de las Américas, embajadores,
entre otras altas autoridades de 19 Estados miembros de la OEA, autoridades
de la Corte Interamericana de Derechos Humanos e integrantes de los poderes
judiciales de las Américas, organismos internacionales, miembros
del IDI, líderes religiosos de distintos credos, intelectuales,
comunicadores y académicos, totalizando más de cien participantes.
Las conclusiones del Diálogo se agruparon en siete ejes temáticos:
I- La Casa Común · Nuestro planeta es nuestra casa común;
y al igual que nuestra casa, nuestra identidad y nuestro destino es común.
· El respeto a la diversidad y a las diferencias es esencial para
hacer posible el mantenimiento de la paz y convivir en concordia.
· Debemos entender la casa común en distintos contextos,
el personal, el familiar, el contexto país y el contexto Americano
con su diversidad cultural y religiosa.
· El diálogo es la piedra angular para construir la casa
común para nosotros y las generaciones futuras.
· Laudato Sí, la encíclica promulgada por el Papa
Francisco en 2015, es una hoja de ruta para toda la humanidad que trasciende
la cuestión religiosa.
· La encíclica plantea problemas comunes que debemos afrontar,
y contiene tres elementos de gran relevancia:
i. Las bases de los supuestos sobre aquello que tenemos en común
y que son necesarios para que haya diálogo.
ii. Lo mejor de las distintas ciencias sobre las certezas en la situación
actual y futura de la casa común.
iii. Plantea un cambio de paradigma a través de un llamado a respuestas
integrales, interdependientes y de orden sistémico en la gobernabilidad.
II- América es zona de paz · América es la región
que menos conflictos bélicos ha tenido en el último siglo
y tiene que proyectarse como ejemplo para otras regiones que están
a la búsqueda de la paz y la concordia.
· La OEA, el foro político principal de las Américas,
tiene como objetivo prioritario la facilitación de la preservación
de la paz en el hemisferio.
· La OEA desarrolla entre otras las siguientes acciones a favor
de la paz en la actualidad: la Misión de Apoyo al Proceso de Paz
(MAPP) en Colombia; la Misión en la zona de adyacencia entre Belize
y Guatemala; el Fondo de Paz de la OEA.
· El diálogo es el instrumento principal para mantener la
paz y abordar la conflictividad social. La Asamblea General de la OEA
en 2014 en Paraguay aprobó una resolución a favor del diálogo
inclusivo para el abordaje eficaz de la conflictividad social, enfocada
en la inversión para el desarrollo integral.
· En base a la convicción del abordaje pacífico y
constructivo de la conflictividad social, América debe superar
la violencia que emerge de la desigualdad en la distribución de
los beneficios de los recursos naturales.
· El fundamentalismo de hoy se expresa más en la política,
la economía y la justicia que en la religión.
III - La desigualdad y la exclusión · El gran desafío
de las Américas y del mundo es la inequidad. Los sectores más
vulnerables son los más afectados ante cualquier crisis económica,
social o ambiental.
· En las últimas dos décadas se lograron fuertes
avances democráticos en la región en favor de los grupos
más vulnerables, como el reconocimiento de derechos de las mujeres
y de las poblaciones afro-descendientes e indígenas.
· La OEA adoptó en 2016 la Declaración Americana
sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas. Es el primer instrumento
regional que promueve y protege los derechos de los Pueblos Indígenas
y surge como una necesidad de respetar los derechos intrínsecos
de estos pueblos originarios.
· En dicho instrumento se reconocen la organización colectiva,
el carácter Pluricultural y Multilingüe de los Pueblos Originarios,
además de pronunciarse sobre la auto identificación de las
personas que se consideran Indígenas.
IV- La Encíclica como fuente de derechos
La encíclica fue catalogada como doctrina, fuente y carta de derechos.
· El sistema internacional de derechos humanos y Laudato Sí
comparten la relevancia de internacionalizar los derechos humanos.
· La relación democracia y derechos humanos es clave en
las respuestas que plantea la Encíclica. La democracia es una condición
fundamental para la vigencia de los derechos humanos y viceversa.
· La Corte Interamericana de Derechos Humanos considera que el
diálogo es el mejor instrumento para proteger y mejorar los estándares
de derechos humanos.
· Los estados deben asegurar el pluralismo político, jurídico
y religioso. El artículo 12 de la Convención Americana de
Derechos Humanos establece que toda persona tiene derecho a la libertad
de conciencia y de religión.
· Los derechos y las libertades son necesarios para el pluralismo
democrático y sólo en este contexto podremos garantizar
los derechos humanos.
· La libertad de expresión es piedra angular de la democracia
y refleja la virtud de los hombres de comunicarse con otros para construir
y transformar el mundo.
Este derecho está vinculado a la participación política,
la libertad religiosa y el cuidado de la Casa Común.
V- La mujer, el desarrollo científico y el cuidado de la Casa Común:
· Laudato Sí propone un modelo de desarrollo coherente,
que incluye a la mujer como actor del desarrollo y la ecología
integral.
· A lo largo de la historia, se han desconocido los aportes de
las mujeres para el cuidado y bienestar de la Casa Común.
· Desde sus inicios, el conocimiento científico se articuló
con el proceso productivo asociado a la generación de riqueza,
pero no en función del bien común. La revolución
científica se transformó en instrumento de poder no sólo
sobre la naturaleza sino sobre los nativos americanos, imponiendo un modelo
hegemónico de organización social y cultural.
· Bajo este modelo, se identifica mujer con maternidad y se desarrolló
en el discurso laico la asimilación de la mujer a la familia y
su confinamiento al espacio privado. Esta consideración justificó
su expulsión del espacio público.
· Hoy, a pesar de los avances de las mujeres, persiste la brecha
de desigualdad: en posiciones de poder, de trabajo decente, brechas en
la participación laboral, la segregación ocupacional y los
salarios.
VI- Respuestas desde las Américas a la problemática de la
Casa Común · Los ejes fuerza de la iniciativa son el diálogo
Interreligioso e intercultural para el cuidado de la Casa Común
y el afianzamiento de la paz.
· La mayor parte del planeta se declara creyente, y esto
debería provocar a las religiones a entrar en un diálogo
entre ellas orientado al cuidado de la naturaleza, a la defensa de los
pobres, a la construcción de redes de respeto y de fraternidad.
(Laudato Sí, 201)
· Las religiones no son el problema, son parte de la solución
a través de un compromiso para promover la paz, la justicia, la
dignidad humana y la protección ambiental.
· El diálogo interreligioso no es diálogo sobre religión
sino sobre valores, que se aplica a otros ámbitos, incluyendo el
social.
· El diálogo deberá considerar las siguientes seis
premisas:
? Solo existe diálogo entre los hombres, entre lo humano que existe
en los seres. No existe diálogo entre instituciones, entre países,
ni entre continentes, sino entre las personas que interactúan en
ellas.
? No hay diálogo si no hay lenguaje común, es decir un lenguaje
de valores.
? Hay valores homologables, valores incomparables y valores incompatibles.
Diálogo significa usar un lenguaje común.
? En el diálogo hay que traer a la conciencia las categorías
de espacio y tiempo como categorías diferenciadas. Respetar el
diálogo significa comprender los tiempos y los espacios del otro,
dentro de los tiempos y los espacios de uno mismo.
? Nadie es dueño de la verdad. Todos somos buscadores de certezas.
Dar lugar a la ciencia en la búsqueda de estas certezas más
no de verdades religiosas.
? El diálogo sin vencimiento, sin reduccionismos económicos,
políticos, culturales, religiosos, necesita comprensión
y transformación.
VII- Valores comunes sobre los cuales profundizar en la iniciativa ·
La paz, la reconciliación, el pluralismo, la justicia, la dignidad
humana y la protección del medio ambiente.
· Ponerse en el lugar del otro y fortalecer la cultura del encuentro.
· No es suficiente con la ética individual: hay que trabajar
las bases morales de la sociedad.
· Todos tenemos oportunidades y obligaciones con la Casa Común.
· Respetar y promover los derechos de los pueblos indígenas.
La cuestión ambiental debe ser trazada en la lógica de los
pueblos originarios y su cosmovisión.
· Construir puentes de diálogo y no muros que separen a
nuestros pueblos: diálogo con la tierra y la concreción
de derechos.
· La religión ha entrado en el mundo político y la
política en la religión, es necesario contribuir desde nuestra
diversidad al bien de la humanidad.
· Estos valores deben ser trasladados a la práctica y a
la realidad de la región.
El Papa Francisco y el Diálogo · Al finalizar el Diálogo,
los participantes fueron recibidos por el Papa Francisco en la sede del
Vaticano, donde el Sumo Pontífice agradeció a la OEA y al
IDI y se refirió al Encuentro y a sus resultados.
El discurso de Gustavo Cinosi, Asesor Principal del Secretario General
de la OEA, Luis Almagro, está disponible aquí.
Próximos Pasos
Durante el encuentro se acogió con beneplácito el ofrecimiento
del Gobierno de Chile para ser sede del próximo Diálogo,
así como la invitación de la Universidad Internacional de
Florida para auspiciar otro encuentro. Los próximos encuentros
profundizarán en los valores identificados para la iniciativa.
http://www.dialogointerreligioso.org/article/details/826/informe-y-resumen-del-1er-encuentro-america-en-dialogo-nuestra-casa-comun
https://www.youtube.com/watch?v=0y4b3ZA9SWk
|